Un transmisor de presión o sensor de presión es un dispositivo que mide la presión en un líquido, fluido o gas. Los transmisores de presión se usan comúnmente para medir la presión dentro de la maquinaria industrial con el fin de alertar al usuario antes de que ocurra una catástrofe. Tienen muchos usos diferentes, la mayoría de los cuales son de naturaleza industrial o automotriz. Un transmisor de presión se reconoce fácilmente ya que es un calibre redondo con varios colores que representan diferentes niveles de presión. Si bien los transmisores de presión son similares a otros medidores, son esenciales para muchas de las aplicaciones para las que se utilizan.
Cómo funciona un transmisor de presión
Hay más de 50 tipos de transmisores de presión que funcionan de manera diferente. Por lo tanto, es difícil describir cómo funcionan todos ellos dentro de los límites de este artículo. Por ejemplo, los transmisores de presión que miden cambios de alta velocidad en la presión dependen de materiales piezoeléctricos, materiales que son capaces de convertir la fuerza mecánica en forma de presión en una corriente eléctrica. Los sensores de presión manométrica, por otro lado, dependen de la presión de aire puro para mover un medidor real y se pueden calibrar a una presión atmosférica específica.
Aplicaciones
Los transmisores de presión se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones. Se usan en maquinaria para advertir a los operadores de máquinas de niveles de alta presión antes de que ocurra un desastre. Los transmisores de presión también aseguran que las máquinas no apliquen demasiada o muy poca presión durante la producción. Los transmisores de presión se pueden usar junto con otros dispositivos para medir la profundidad, la altitud, el flujo de agua e incluso la pérdida de presión para evitar fugas en un sistema.
Ventajas
Los transmisores de presión tienen varias ventajas importantes que otros tipos de medidores no tienen. Por ejemplo, los transmisores de presión miden directamente los niveles de presión y las diferencias de presión. Los transmisores de presión pueden soportar prácticamente cualquier entorno e incluso pueden sumergirse por completo. Están hechos de materiales piezoeléctricos, que son inmunes tanto a la radiación como a los campos electromagnéticos. Los transmisores de presión también se pueden conectar a otros sistemas, como los circuitos eléctricos, y se pueden calibrar para medir la presión relativa a la presión atmosférica.